\»Macerados cítricos dulces, hierven sobre un néctar de Ylang Ylang y Algodón de Azúcar.
Un humeante halo de Vainilla, Caramelo y Chocolate blanco,
envuelve este elixir digno de los Dioses.\»
Inspiración: La Infancia.
El sabor del primer beso.
La inocencia como ofrenda.
Pertenece a la Familia Olfativa Floral- Oriental- Gourmand.
Notas Etéreas: Remolinos de cítricos y Chocolate Blanco.
Notas Álmicas: Ylang Ylang, Algodón de Azúcar y Caramelo
Notas Profundas: Vainilla, Incienso y Cera de Abeja.